El programa Next Generation de la Unión Europea se diseñó para mitigar el impacto económico y social asociado al COVID-19, impulsando una recuperación caracterizada por la sostenibilidad y la digitalización.
A finales de 2019, la Unión Europea ya comenzó su andadura hacia la transición ecológica con el lanzamiento del Pacto Verde Europeo, también conocido como European Green Deal, un ambicioso proyecto para lograr ser el primer continente climáticamente neutro antes del 2050.
Sigue leyendo para conocer en qué consiste la transición ecológica.
El camino hacia la transición ecológica en la UE
Como mencionamos, la Unión Europea se ha propuesto el objetivo de conseguir la neutralidad climática en 2050, transformando al territorio en una economía sostenible y climáticamente neutra basándose en los siguientes pilares:
- Descarbonización, para reducir el número de emisiones de CO2.
- Eficiencia Energética, para optimizar recursos y contribuir a la protección del medio ambiente.
- Contaminación 0, para alcanzar un entorno más saludable.
- Economía Circular, poniendo en valor los residuos como fuente de recursos.
- Movilidad Sostenible, transformando la forma en la que se mueve la sociedad.
- De la granja a la mesa, con la sostenibilidad como eje vertebrador de la cadena alimentaria.
Bajo estas premisas, se pretende conseguir una Europa más competitiva, más fuerte, más digital, y sobre todo más verde.
Transición ecológica en España
Dentro del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia en el marco del programa Next Generation UE, en España se desarrolló el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia España Puede, con un importante programa de inversiones y reformas estructurales para lograr cuatro objetivos transversales: avanzar hacia una España más verde, más digital, más cohesionada desde el punto de vista social y territorial, y más igualitaria.
España recibió 140.000 millones de euros de los fondos de recuperación Next Generation, de los que un 37% se destinaron a transición ecológica, uno de los cuatro ejes transversales del Plan de Recuperación a través de los que se distribuyen los fondos europeos en nuestro país.
Este primer eje de transición ecológica refuerza la inversión pública y privada para reorientar el modelo productivo, impulsando la transición verde, la descarbonización, la eficiencia energética, el despliegue de las energías renovables, la electrificación de la movilidad, el desarrollo del almacenamiento de energía, la economía circular, las soluciones basadas en la naturaleza y la mejora de la resiliencia de todos los sectores económicos.
Además, en este eje de transición ecológica se integran una serie de políticas palanca entre las que destacamos:
- Agenda urbana y rural, donde las inversiones del tejido empresarial están dirigidas al Plan de choque de movilidad sostenible, segura y conectada, en entornos urbanos y metropolitanos así como a la Transformación y digitalización de la cadena logística del sistema agroalimentario y pesquero con el objetivo de fomentar la calidad, sostenibilidad y economía circular.
- Infraestructuras y ecosistemas resilientes. Las actuaciones se orientaron a la preservación del espacio litoral y los recursos hídricos, así como a la modernización de infraestructuras clave de transporte e intermodales dentro de los proyectos de movilidad sostenible, segura y conectada y a la conservación y restauración de ecosistemas y su diversidad.
- Transición energética justa e inclusiva, en la que las inversiones se dirigieron hacia el despliegue masivo del parque de generación renovable de energía, el impulso de proyectos de hidrógeno renovable y de infraestructuras eléctricas, la promoción de redes inteligentes y su integración sectorial.
- Modernización y digitalización del tejido industrial y de la pyme, donde las inversiones secentraron a la Modernización y sostenibilidad de la industria, al impulso de las industrias tractoras “verdes” y hacia la Estrategia de Economía Circular.
Diferentes medidas que pueden adoptar las empresas hacia la transición ecológica
Los seis pilares sobre los que se basó la Unión Europea para transformar el territorio en una economía sostenible y climáticamente neutra pueden servir de guía a las empresas para adoptar medidas y sumarse a la transición ecológica.
Uso de energía limpia, asequible y segura
Un gran número de las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE proceden del uso y la producción de energía, por lo que la descarbonización del sector de la energía constituye un paso crucial para la neutralidad climática de la UE que implique y beneficie a todos los consumidores.
Acciones en materia de eficiencia energética
Establecer una estrategia de eficiencia energética puede ayudar a las empresas a fortalecer su negocio y aumentar sus posibilidades de inversión y expansión. Mediante medidas correctivas es posible generar un aumento de dicha eficiencia que conlleve a una reducción en la factura eléctrica y, por lo tanto, en un ahorro económico y en una empresa más verde.
Contar con energía suficiente y asequible y usarla de modo eficiente, permite a las empresas mejorar la productividad y la competitividad, pero también el confort y el compromiso de sus trabajadores.
Reutilización de recursos
El ahorro económico que conlleva la reutilización de recursos en lugar de la creación de estos desde cero también es un aspecto positivo que las empresas pueden tener en cuenta de cara a su transformación digital. Las empresas que se comprometen a apostar por el reciclaje evitando la generación de nuevos residuos contribuyen a cuidar el medioambiente.
¿Cómo solicitar los fondos Next Generation EU?
Las ayudas de los fondos Next Generation, convocadas tras la pandemia del COVID-19, se encuentra ya fuera de plazo.
Recuerda que los contenidos de este blog tienen carácter informativo. Cualquier actuación motivada por su contenido o por la interpretación de las normas a las que hace referencia deberá ser analizada de forma específica teniendo en cuenta la situación particular de que se trate.
