¿Todavía no has presentado la declaración de la Renta 2021? Sabemos que hay muchos conceptos que resultan complicados a la hora de tramitar la declaración, como por ejemplo la declaración del IRPF de las ganancias patrimoniales.
Por este motivo, tenemos una serie de posts que te explican cómo declarar los rendimientos de capital mobiliario, las criptomonedas o incluso cosas que no sabías que hay que incluir en la declaración de la Renta.
En este post nos vamos a centrar en este concepto que puede dar sus quebraderos de cabeza a la hora de presentar la declaración, estamos hablando de las ganancias patrimoniales (o pérdidas). Es decir, las ganancias que hemos obtenido a lo largo del año de la venta de inmuebles. ¿Cómo tributan? ¿Qué mínimos están exentos? ¡Aquí tienes toda la información!
Qué son las ganancias patrimoniales
La Agencia Tributaria establece como ganancias patrimoniales:
- Las ganancias derivadas de la venta de inmuebles dentro del territorio español. Un ejemplo de esta ganancia sería reembolsar un fondo de inversión o vender un inmueble heredado.
- Las ganancias patrimoniales de los valores emitidos por personas o entidades residentes en el territorio español, de otros bienes muebles o de derechos que deban cumplirse en España, o cuando se incorporen bienes al patrimonio, aunque no deriven de una transmisión previa. Un ejemplo de esta ganancia podría ser alguna ayuda o subvención pública.
Se considera ganancia patrimonial siempre que la diferencia entre el valor de transmisión y el soportado en la compra sea positivo. En cambio, si esta diferencia es negativa, estamos hablando de una pérdida patrimonial.
Para que se considere ganancia o pérdida patrimonial deben cumplirse tres requisitos:
- Que exista una variación en el valor del patrimonio,
- Que haya una alteración de la composición del patrimonio,
- Que la renta obtenida no esté sujeta a ningún otro concepto de impuesto.
Exenciones en la declaración
Ya sabemos qué se considera en las ganancias patrimoniales, pero, ¿qué conceptos estarían exentos?
Si un bien pasa a ser parte del patrimonio sin producir ninguna alteración en el mismo, no sería obligatorio declararlo.
Algunas de estas exenciones son:
- La división de sociedades de gananciales al final del matrimonio.
- La disolución de una comunidad de bienes o la separación de sus miembros.
- Una reducción en el capital social.
- Las transmisiones lucrativas causadas por la muerte de un contribuyente.
- Las transmisiones de empresas o participaciones “inter vivos”.
- Las aportaciones a los patrimonios de personas con alguna discapacidad.
Cómo se valoran las ganancias patrimoniales
Para calcular las ganancias o pérdidas patrimoniales y presentar la declaración por su IRPF, debemos restar al precio de compra el precio de venta y todos los gastos generados por esta venta.
Hay que tener en cuenta que si la venta o adquisición no tiene contraprestación económica, se valora a partir del importe del Impuesto de Sucesiones o Donaciones. Su valoración mínima es de cero euros y la valoración máxima es su propio valor de mercado.
Los activos financieros se valoran aplicando leyes específicas.
¿Cómo se gestiona la ganancia patrimonial en caso de venta de un inmueble heredado?
- A las ganancias devengadas antes del 1 de enero de 2015 se le aplica un coeficiente al valor de adquisición que incrementa el importe pagado en función del año en el que se realizó la compra.
- Para las ganancias devengadas después del 1 de enero de 2015, el valor de venta es el importe pagado, sin aplicarle ningún otro factor corrector.
- Si el inmueble estuvo arrendado, se restan las amortizaciones que tuvieron lugar en este período.
Por norma general, en las adquisiciones Hacienda suma el importe real de la adquisición, las inversiones y mejoras efectuadas, y los gastos y tributos inherentes. A esta cantidad se restan las amortizaciones y se obtiene el valor de adquisición.
Por otra parte, para las transmisiones se calcula el importe real de la transmisión y se restan los gastos y tributos inherentes.
Compensación de ganancias y pérdidas patrimoniales
En caso de tener una pérdida patrimonial, hay ocasiones en las que se puede compensar con una ganancia patrimonial. Esta compensación consiste en bajar la ganancia de una venta con la pérdida de otra, dentro del mismo ejercicio fiscal. De este modo se puede compensar hasta el 25% de las pérdidas.
Las compensaciones de ganancias y pérdidas patrimoniales son muy comunes al invertir en bolsa o en productos derivados. En algunas ocasiones puede ser interesante vender acciones con pérdidas para evitar disminuciones en el patrimonio.
Gracias a la compensación de ganancias y pérdidas patrimoniales, solo se pagan impuestos por la parte de los beneficios reales que se han obtenido. Es decir que se tributa solamente la diferencia entre ambas partes.
Ahora que ya hemos hecho este repaso acerca de cómo declarar en el IRPF las ganancias patrimoniales, ¿te has quedado con ganas de más información? Te pueden interesar nuestros posts sobre: